Libros Bíblicos II - Los Libros de Nuevo Testamento


El Autor del Nuevo Testamento es El Espíritu Santo. El inspiró a Mateo, Marcos, Lucas, Juan, Pablo, Santiago, Pedro, Judas y al autor anónimo de Hebreos para escribir.

Los veintisiete libros del Nuevo Testamento proveen testimonio de la obra de Dios
 por medio de Jesucristo para dar cumplimiento a este nuevo pacto.

Más de 400 años separan los eventos finales (Nehemías 13:4-30) y las profecías finales (Malaquías 4:6) del Antiguo Testamento (424 a.C.) de los primeros eventos (Lucas 1:5-25) narrados en el Nuevo Testamento (6 d.C.). A este período se le conoce como los 400 años de silencio, pues no hubo Palabra de Dios dada a Su pueblo en ese tiempo. Aunque la voz de Dios guardó silencio, Su mano estuvo trabajando activamente dirigiendo el curso de los eventos de la historia durante estos siglos.

Testamento y Pacto ambos son traducciones de la misma palabra griega (diathéké), es un Nuevo Testamento en contraste con el Antiguo Testamento o antiguo Pacto. Ambos Testamentos son inspirados por Dios y útiles para todo cristiano. La promesa central que Dios nos dio por medio de los profetas en el Antiguo Testamento es la de un Nuevo Pacto (Jeremías 31:31-34; Ezequiel 36 – 37). El punto principal de este pacto sería la obra de Dios para tratar con el problema del pecado de la humanidad. Esto sucedió en la muerte substitutiva de Jesucristo en la cruz, al sufrir la ira de Dios y tomar sobre sí mismo el pago por los pecados y transgresiones de quienes creen en El.

Los veintisiete libros del Nuevo Testamento proveen testimonio de la obra de Dios por medio de Jesucristo para dar cumplimiento a este nuevo pacto.

El Canon del Nuevo Testamento se refiere a la colección de libros inspirados por Dios. ¿Cómo se decidió que libros son inspirados? Se dice a menudo que un concilio reunió una lista del canon alrededor del año 300 d.C. Es importante entender que este concilio no “incluyó” los libros dentro del canon o los “declaró” inspirados por Dios, los libros ya eran inspirados y por tal razón formaban parte del canon desde el momento en que fueron escritos. Generalmente si un libro había sido escrito por un apóstol como Mateo, Pedro, Juan o Pablo o por uno de sus colaboradores cercanos como Lucas o Marcos, se aceptaba como inspirado, además de ser consistente con el resto de la Biblia pues forma parte de un todo. Existen escritos antiguos, algunos del primer siglo y algunos atribuidos a apóstoles como Tomás, Pedro o Judas que son heréticos, no es la antigüedad lo que determina la inspiración o la veracidad de un libro.

El Autor del Nuevo Testamento es El Espíritu Santo. El inspiró a Mateo, Marcos, Lucas, Juan, Pablo, Santiago, Pedro, Judas y al autor anónimo de Hebreos para escribir. A diferencia del Antiguo Testamento que tomó aproximadamente mil años para completarse (1400-400 a.C.), el Nuevo Testamento tomo sólo la mitad de un siglo para escribirse (50-100 d.C.).

El Nuevo Testamento fue escrito en lenguaje Griego de uso común llamado Koiné, este idioma era casi el segundo lenguaje universal en el primer siglo de la Fe, casi tan conocido y extensamente usado como lo es el inglés en nuestros días. La razón por la que los judíos hablaban griego, la encontramos en lo que se conoce como el período inter testamentario y fue debido a que Palestina estuvo bajo dominación griega desde el año 334 antes de Cristo hasta el año 142 antes de Cristo, aunque continuaron bajo la influencia griega hasta el año 63 a.C., cuando Palestina pasó a ser provincia del Imperio Romano. A diferencia de los persas y los romanos que les permitieron ejercer su religión, guardar sus costumbres, sus tradiciones y no intervinieron en su cultura, los griegos si imponían su cultura (helenismo), y su idioma a las provincias conquistadas, esto hizo necesario que se hiciera una traducción del Antiguo Testamento completo al idioma griego alrededor de los años 250-125 a.C., que se conoce como la Septuaginta, porque la mayoría de los judíos de la diáspora hablaba más griego que hebreo o arameo. Como un ejemplo de la importancia que se le daba al idioma griego y la difusión de su uso, Flavio Josefo, también conocido por su nombre hebreo José ben Matityahu, historiador judío y fariseo que vivió del año 37 al 101 d.C., escribió sus obras más conocidas, “Las guerras de los Judíos” y “Antigüedades Judías” mientras residía en Roma utilizando el griego Koine para escribir y no el hebreo o el latín como podría esperarse.

Alguien me preguntó en alguna ocasión si 2ª.Timoteo 3:16-17 “Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia, a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra.” se refería solamente al Antiguo Testamento o a toda la Biblia, pues al momento de escribir Pablo a Timoteo aún no se había terminado de escribir el Nuevo Testamento ni había sido reconocido como inspirado por la Iglesia. Y la respuesta es que Dios al hablar por medio de Pablo en este pasaje se está refiriendo también al Nuevo Testamento. Hay varios ejemplos en La Biblia que nos muestran como el Nuevo testamento era reconocido como Las Escrituras es decir como La Palabra inspirada por Dios. En 1ª.Timoteo 5:18 Pablo cita el Antiguo Testamento (Deuteronomio 25:4) al escribir “Pues la Escritura dice: No pondrás bozal al buey que trilla;” y en el mismo verso cita Lucas 10:17 “y: Digno es el obrero de su salario.” Llamando a ambos textos “La Escritura”. De igual manera en 2ª.Pedro 3:16, Pedro nos habla de cómo los indoctos e inconstantes tuercen para su propia perdición algunas cosas difíciles de entender que Pablo ha escrito en sus epístolas, al igual que tuercen “las otras Escrituras”. En estos dos ejemplos Pablo escribiendo bajo inspiración del Espíritu Santo reconoce como Escrituras los Evangelios, y Pedro de igual forma escribiendo bajo inspiración reconoce como Escrituras las epístolas de Pablo.

Otros dos ejemplos son Gálatas 1:11, en donde Pablo nos dice que el Evangelio que él predica no lo recibió de ningún hombre sino por revelación de Jesucristo; y 1ª. Tesalonicenses 2:13 donde nos dice que la palabra de Dios que ellos han escuchado de Pablo no la recibieron como palabras de hombres sino como lo que es La Palabra de Dios.

James Packer nos dice al respecto del Canon Bíblico, “La Iglesia NO nos dio el Canon del Nuevo Testamento de igual forma que Sir Isaac Newton no nos dio la fuerza de la gravedad. Dios nos dio la gravedad, por obra de Su creación y de igual forma nos dio el Canon del Nuevo Testamento, inspirando los libros que lo componen”.

Hay quienes argumentan que Pablo escribió a Timoteo antes que se escribieran los Evangelios, esto NO es verdad. Según William McDonald en su Comentario Bíblico, El Evangelio de Mateo en griego fue escrito entre los años 50-55 y circulaba una copia escrita en arameo antes de estas fechas, y el Evangelio de Lucas fue escrito alrededor del año 60, primera de Timoteo fue escrita entre los años 66-67. Frank C. Thompson en su Biblia de Estudio nos da fechas similares. William McDonald nos dice que hay quienes intentan fechar los Evangelios con fecha posterior al año 70 debido a su incredulidad de que Jesús fuese capaz de predecir la destrucción de Jerusalén.

Autor de Escrito: Breve Comentario Bíblico Predica La Palabra (Lo Invito que vaya a la Pagina de Facebook en este Link de la Pagina: Breve Comentario Bíblico Predica La Palabra

Fuentes

John MacArthur, Biblia de Estudio MacArthur y "Porque Creo en la Biblia"

William MacDonald, Comentario al Nuevo Testamento

Clinton E. Arnold, Como nos llegó La Biblia

Comentarios

Entradas populares